El masaje relajante es una terapia manual, que tiene como objetivo mejorar el bienestar de la persona y aumentar la producción de endorfinas del cuerpo
Antes de centrarnos en las ventajas, queremos explicarte resumidamente la historia del masaje. Y es que esta técnica es muy pero que muy antigua. De hecho, su origen se remonta a las civilizaciones chinas, egipcias y griegas. Los masajes siempre se han usado como medio para poder sanar las dolencias corporales y psicológicas.
La fecha más antigua que se conoce es en el 2700 a.C, cuando se creó un libro sobre medicinales chinas que se titulaba El libro clásico de medicina interna del emperador amarillo. Un escrito que se convirtió, y que es hoy en día, en el libro básico sobre el masaje. En este se detallan prácticas, técnicas y tratamientos distintos de la medicina oriental, como por ejemplo, la acupuntura.
200 años más tarde, en Egipto, se desarrolló la técnica de la reflexología, una terapia que, en la actualidad, se utiliza muchísimo para resolver problemas físicos y psicológicas, como por ejemplo, problemas de fertilidad.
Por otro lado, en el 1000 a.C, los monjes budistas japoneses estudiaban la técnica China Tui Na, en el que realizaron sus propias modificaciones, convirtiéndolo en un propio masaje llamado Anma.
Por último, no cabe duda que los griegos fueron los más influyentes en la historia del masaje. Esta cultura le daba muchísima importancia a lo físico, por lo que crearon un sinfín de técnicas y tratamientos para sanar el cuerpo. Fue en esa época, 800-700 a-C, que se incluyó la técnica que conocemos hoy como masaje descontracturante, con el objetivo de disminuir y eliminar los nudos que se forman en el tejido muscular.